jueves, 7 de enero de 2010

NO ES NORMAL, NO ES NORMAL


Para aquellos "twitteros" que no les queda clara la figura de a lado:

NO ES NORMAL !!!!

Te apoyamos Esteban Arce

Atte
Los Normales

ACABEMOS CON ESTEBAN ARCE

Columna de Alvaro Cueva "El Pozo de los deseos Reprimidos" del Jueves 7 de Enero 2010: "Acabemos con Esteban Arce"

Voy a hacer algo que ni en mis más remotas pesadillas pensé hacer: voy a defender a Esteban Arce por homofóbico.

Como usted sabe, desde que comenzó la semana, medio México ha hablado mal de Esteban Arce a raíz de un video extraído de su programa “Matutino Express” de 4TV, que fue subido a la internet, donde este señor comete severos errores de conducción y habla pestes de la homosexualidad.

Y el video fue, y el video vino, y los programas de radio lo retomaron, y los twitteros se dieron vuelo, y en la televisión lo comentaron.

En cuestión de horas Esteban Arce se convirtió en el enemigo público número uno. A su lado, Osama Bin Laden era un santo. Punto.

Vi, oí y viví todo el escándalo, desde los insultos de la gente de internet, que pedía su cabeza, hasta la supuesta reacción del Presidente de Grupo Televisa, pasando por los insultos de quienes lo quisieron entrevistar y no pudieron, por montones de burlas y por unos debates comiquísimos sobre la homosexualidad, Darwin y los animales.

Estoy verdaderamente asustado, pero no por lo que dijo Esteban Arce sino por la irresponsabilidad de los comunicadores que trabajan frente a las cámaras y los micrófonos de los medios tradicionales, y por la reacción de la gente que se expresa por internet.

¿Por qué? Porque la nota de lo que comentó Esteban era vieja. Sucedió a mediados de diciembre y hubo quien, en el colmo del cinismo, la vendió como una nota de noviembre.

¿Por qué le digo que esto es un acto de irresponsabilidad? Porque a todos esos “periodistas” les debería dar vergüenza estar comentando como nota del día algo que sucedió hace casi un mes.

Eso demuestra que no tenían otra cosa de qué hablar y que tomaron el primer dato escandaloso que encontraron, que no van al día con lo que está pasando, que no ven la televisión y, lo peor, que no les importa.

Es delicadísimo, amarillista, chafa y las cosas que dijeron del señor Arce, peores porque lo agredieron igual o peor que como él agredió a los homosexuales.

Le juro que yo veía eso y me sentía en una isla del cuarto mundo condenada al fracaso por culpa de unos medios de comunicación que en lugar de informar a su población, la desinforman, le calientan la cabeza, la excitan, la drogan.

Estoy angustiadísimo porque las personas que armaron todo ese numerito no son las tradicionales chismositas de la radio, las columnistas del corazón o los típicos humoristas de octava de la tele sino varios de los más respetados comunicadores de nuestra nación. ¡Estamos perdidos!

Ahora, el asunto en las redes sociales fue todavía más serio porque ahí la gente, protegida por el anonimato y la distancia, tira a matar con un salvajismo impresionante.

E igual que como pasó con los medios tradicionales, nadie leyó, nadie se fijó en la fecha de la nota, nadie recapacitó en las intenciones de quienes subieron ese video a la red y todos se dejaron llevar por la tripa, incluyendo al mismísimo Emilio Azcárraga, lo cual habla bastante mal de él o de la persona que se hace pasar por él en twitter.

Si realmente la gente de la red y los medios tradicionales estuvieran furiosos por la homofobia en la pantalla chica, en este instante estarían linchando a una decena de personas que están haciendo y diciendo monstruosidades hoy, no a Esteban Arce por algo que dijo el mes pasado.

Si Televisa en verdad escuchara al público y tuviera una postura crítica alrededor de la homofobia y de otras manifestaciones similares, hace mucho que hubiera cancelado más de la mitad de sus programas tanto en sus canales abiertos como en sus canales de televisión de paga.

No nos hagamos tontos, esto no fue real, fue una cortina de humo, un fenómeno difundido y retomado para que muchas personas tuvieran algo de qué hablar en estos días en que casi no hay notas.

Y tanto los comunicadores profesionales como los de la red encontraron a su “Juanito” del mes para crisparle los nervios a la opinión pública.

Porque sí, Esteban Arce es homofóbico, pero el cardenal Norberto Rivera Carrera también. ¡Y a que nadie le exigió al Papa Bendicto XVI, por twitter, que se lo llevara de México!

¡A que nadie se burló del cardenal con el odio y la violencia con la que las masas se burlaron de Esteban Arce! ¡A que nadie lo trató de linchar por algo que dijo el mes pasado!

Pues claro que no, el cardenal, bueno o malo, es otra clase de personaje. Estaban, no. Él es una criatura vulnerable con otro tipo de antecedentes, es alguien ideal para esta clase de escándalos.

Estoy verdaderamente asustado, insisto. Esto no es normal, es grave.

Me lleva a pensar en la nueva voracidad de los medios de comunicación, en un nuevo tipo de adicción editorial y me llena de desesperanza porque podría ser el ensayo de cosas peores, de dimensiones mucho mayores, que podrían venir en el futuro inmediato. ¿A poco no?

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P.D. "Aquellos weyes que se la pasan todo el día en las redes sociales, son los weyes más antisociales que puede haber"

Animo Esteban, te apoyamos